Los antecedentes más lejanos de los orígenes del Arte “Naïf” en Cuba se remontan a los siglos XVI y XVII de la época colonial, cuando el puerto de La Habana era el más importante del Caribe y había despertado el interés de visitantes europeos, norteamericanos y emigrantes de múltiples nacionalidades y orígenes, quienes fueron testimoniando en sus observaciones, mediante escritos y piezas gráficas, los aportes de culturas europeas diferentes imbricadas con africanas, precolombinas y asiáticas.
Hay constancias documentales que ya en el siglo XVIII, humildes pintores populares nacidos en Cuba, sin formación académica, decoraban profusamente las fachadas de comercios y los interiores de las viviendas, con escenas humanas, plantas y flores y pintaban además murales y avisos con letreros, o animales reales o fabulosos, que identificaban calles y comercios.
Asimismo escultores aficionados tallaban motivos religiosos y otros por encargo en madera y los policromaban, con brillantes colores, porque eran las gamas cromáticas que tradicionalmente preferían la mayor parte de las mujeres y hombres nacidos en Cuba.
Otros artesanos cincelaban sortijas y adornos en marfil con imágenes de seres y animales naturales o fantásticos, atractivos o terroríficos y también relicarios y camafeos. Se repujaban motivaciones varias en cueros vacunos y mujeres artesanas tejían manteles y tapetes realizaban sobrecamas con pequeños retazos de telas multicolores, y vestuarios con llamativos colores preferidos, como se ha dicho por muchos nacionales. Además de los muros de las vías publicas, eran pintadas paredes, e interiores de establecimientos comerciales de variados destinos, con paisajes más o menos naturales o irreales.
Pintaban también las carretillas, carromatos y hasta los latones de vendedores callejeros de tamales, los caballitos y todos los componentes de los carruseles, tios vivos infantiles, carpas y decoraciones circenses, anuncios de bailes, avisos y festividades, con rótulos y motivos en colores muy llamativos.
Algunas de las manifestaciones descritas fueron testimoniadas en sus memorias por visitantes foráneos, que en etapas coloniales viajaban a la Habana y recogieron, en dibujos, grabados y memorias escritas: edificaciones, paisajes, tipos populares, transportes, vendedores y a la vez las calificaciones de algunas de las manifestaciones por parte de relevantes sectores sociales que los denominaban “mamarrachos” y clamaban al mismo tiempo por su desaparición, materialización emprendida en el Siglo XIX por el Obispo de La Habana, Juan José Díaz de Espada y Landa.
Los artesanos populares continúan en diferentes épocas realizando además de las referidas decoraciones religiosas, disfraces masculinos y femeninos, farolas, fantásticas caretas, decoraciones de vehículos, adornos para perros, chivos, y caballos, para carnavales y decoraciones de asociaciones comerciales, sociales y fraternales, festividades y celebraciones diversas: bailes, conmemoraciones, fiestas infantiles, tómbolas, aniversarios y cumpleaños, en fechas muy anteriores al reconocimiento de esas expresiones populares como arte.
Las influencias y antecedentes del Arte “Naïf” han sido proyectadas en Cuba en diferentes géneros y aplicaciones de las manifestaciones visuales del diseño gráfico contemporáneo: carteles políticos, publicitarios, caricaturas, esculturas realizadas en piedras por un campesino en lomas de la región oriental cubana, y hasta en construcciones arquitectónicas populares decoradas con fragmentos de azulejos y vidrios durante épocas coloniales y republicanas.
La impronta de algunas de las expresiones populares en épocas coloniales fueron recogidas en ilustraciones de cajetillas de cigarros y en el siglo XX. En postales que acompañaban productos comerciales, en tarjetas amorosas y en propagandas comerciales disímiles.
Reconocimientos A finales de la década de 1930 y principios de 1940 surgió en La Habana, un ligero reconocimiento del desempeño de pintores populares sin formación académica como “Naïf” cubanos, relacionado al igual que en París, con los intereses de artistas antiacadémicos, que consideraron estimulantes y favorecedores de sus propias transformaciones la valoración de las expresiones referidas.
Se conoce que las manifestaciones del Arte “ Naïf” históricamente han tenido, múltiples denominaciones: pintura ingenua, primitiva, popular, intuitiva, autodidacta, espontánea, instintiva, aficionada, marginada y antiacadémica, entre otras.
Recientemente esa expresión ha sido rebautizada con una nueva terminología “Arte mágico”, por otro francés Gérald Mouial, coleccionista amante de las artes plásticas cubanas contemporáneas, fotógrafo, autor y coautor de varios títulos de manifestaciones artísticas cubanas profusamente ilustradas, entre las que se encuentran “El Cementerio de Colón de La Habana”,”La Santería , religión popular cubana” y el título presentado en marzo del 2005, en el Centro de Arte “La Casona”, Génesis, el cual recoge la más voluminosa y representativa selección de Arte “Naïf” cubano contemporáneo publicada hasta el presente.
El libro titulado “El Arte Mágico en Cuba” reproduce a todo color 600 obras, de 51 pintores cubanos, sus fotos personales, orígenes, vidas, sueños, filosofías, influencias recibidas, opiniones políticas, religiosas y aspiraciones futuras de creadores consagrados de esta expresión mágica, entre los que se encuentran Manuel Mendive, pintor académico, Ruperto Jay Matamoros, pintor intuitivo, Mercy Rivadulla, pintora arquitecta, Nicolás Delgado, pintor fotógrafo, Alicia Leal, pintora académica, Armando Torres, pintor de puertas cerradas, Julio Breff, pintor campesino, Crispín Sarrá, pintor changó, Alejandrina Cué, diseñadora pintora, y Lawrence Zúñiga, pintor de Baracoa,.entre otros muchos valiosos artistas de esta modalidad, presentados en Arte Mágico en Cuba, por el francés Gérald Mouial:, quien invita a los lectores a descubrir una Cuba donde, como por arte de magia todo es posible.
Según algunas palabras de Rafael Acosta de Arriba, presidente del Consejo Nacional de las Artes Plásticas de Cuba: “Este libro es algo especial. Es un abordaje profundo a una zona del arte cubano actual que nunca había recibido la atención que se merece.
La estructura del libro, los textos, las entrevistas a los artistas con sus testimonios y vivencias vinculadas a la creación, el apoyo fotográfico y de las obras, nos ofrecen un mosaico muy completo del arte que el autor ha denominado ”mágico”, en Cuba.
Gérald Mouial ha gestado un libro de una belleza incomparable. Sus recorridos por toda la isla, su ojo de coleccionista, el apelar a Orlando Hernández –el mejor especialista cubano sobre el tema– para el prólogo y la propia selección de artistas, han concluido en este magnífico volumen, un verdadero regalo para los amantes del arte cubano y para los degustadores del arte mágico en general.
El libro presenta la obra de 51 pintores, su vida y sus sueños, que según confiesa su generador, lo han seducido al punto de no dudar: en calificar sus obras como “MÁGICAS”. Añade que estos mágicos artistas, desconocidos por la mayoría, han rechazado de forma unánime el calificativo de “naïf” y brinda al lector una muestra de sus obras, parte de sus vidas y sueños.
De gran formato la obra nos brinda un riguroso ensayo especializado, que su autor sustenta en la más completa investigación directa sobre esta expresión de las artes visuales nacionales publicada hasta el presente en Cuba.
Me gustaria saber algo de Nicolas Delgado, viejo amigo y companero de trabajo de la Revista Cuba.
Por favor, si pueden, dejenle saber que Ivan Cañas, el fotografo, se intereso por el. Gracias…..Ivan
ivancanas@aol.com
[…] Os dejo un artículo encontrado en el Blog OASIS sobre el origen y la continuidad del arte Naïf en Cuba ”El Arte Naïf en Cuba” […]
FELICIDADES, POR SU COMENTARIO, PERO, POR FAVOR COMO, USTED VA A HABLAR DEL ARTE NAIF DE PINAR DEL RIO, Y NO VA A MENCIONAR A REGUEIRO Y A REYNA LEON, SOY EN CUBA, QUIEN CONOCE A MUCHOS OTROS PINTORES NAIF, DESCONOCIDOS POR MOUIAL Y POR MUCHOS Y TENGO, SUS ORIGINALES POR CHORROS, EN MI PODER, SALUDOS A MONTESINOS, PEDRO PABLO OLIVA, HUMBERTO EL NEGRO Y DEMAS, SOY NOEL GUZMAN BOFFILL ROJAS, MEDIO, PINTOR NAIF, ESTOY POR BOLIVIA.
Yo soy gallosa uno de los pintores del segundo libro de gerald mouialy quisiera saber sí ya hizo el segundo libro donde ,ya que me interesa saber sí va a enviar un libro a cada uno de participantes en el libro.mi correo es javiergallosa@gmail.comi