Una amiga española que conocí cuando aun era una estudiante universitaria nos visitó recientemente, y en una fiesta sorpresa a una quinceañera del barrio me dijo unas palabras que quedaron grabadas en mi mente: “Cuiden esto, donde vivo nadie ayuda a nadie, me mata la soledad porque mi hija trabaja y mi vecino más cercano ni me conoce. Te puedes morir que eso a nadie le importa, cada uno anda inmerso en su vida. Aquí ustedes son ricos porque cuentan con una mano amiga en cualquier lugar y no les hace falta ir a ningún psicoanalista pues cuando conversas con cualquiera eliminas el stress”.
Sabias fueron las palabras de Margarita, lo vivo a diario en carne propia porque aunque tengo una familia muy corta nunca me he sentido sola y eso para mí tiene un alto valor.
Se en erizo la piel con tan cruda realidad…..yo tengo 3años viviendo en esta casa que esta en una privada que tiene18casas y solo con una vecina ….
y la vida en soledad debe ser muy triste amiga, pero acá me tienes en este oasis para conversar cada vez q desees. Un abrazo.
Y es la pura verdad lo que te dijo. Vivir y ser felices Isa
Pero Bruji acá estamos acostumbrados a ser solidarios, a tener buenas relaciones con los vecinos, a ayudarnos mutuamente y nos cuesta pensar q la realidad pueda ser diferente en otros lugares. Un abrazo desde mi oasis.
Que bueno que todavía en algunos paises podemos seguir hablando de amistad, de tender y recibir una mano, Que pasó con los demás??
Retribuyendo la visita. A veces las cosas por ser tan cotidianas, por tenerlas a la mano desde que abrimos los ojos al día, no las sabemos apreciar en su justa medida. Gracias por recordarnos lo esencial.